VOLEA ALTA DE REVÉS: "EL ALGODÓN NO ENGAÑA"

Uno de los golpes que mejor denuncian, por su modo de ejecución, el nivel técnico del jugador de pádel es la volea alta de revés. Ejecutarla con maestría implica no sólo devolver la bola con dirección certera sino además imprimir la fuerza y profundidad necesarias para que en lugar de un golpe defensivo pueda convertirse en un argumento para el ataque y la conquista del punto.
Un armado rápido, alto, con empuñadura de martillo ha de requerir que la articulación del codo sea lo más libre posible en el inicio del acompañamiento. Pero en las sesiones de entrenamiento en la escuela he observado que a muchos jugadores con codo de tenista -siempre es crónico- o con falta de flexibilidad e les resulta demasiado forzada la mecánica para hacer más eficaz ese golpe o incluso para la mera devolución con la solvencia precisa para no entregar el punto al contrario. En estos casos siempre me ha resultado determinante aconsejar a esos jugadores con poco o ningún antecedente en la práctica del tenis un cambio hacia empuñadura este de revés, que mejora el plano de impacto de la pala con la bola, más natural, y permite incrementar la aceleración del brazo desde la rotación del hombro, con una ganancia también en el tiempo de acompañamiento del golpe para asegurar un buen control.

 © Santi Casal.


JUGADORES DEL MES DE OCTUBRE:

Femenino: Mari Sánchez
Masculino: Ex aequo, José Godón y Rafa Martínez